Por: Julián Sabogal V.
No es la primera vez que la Alcaldía Mayor de Bogotá, encabezada por el Instituto de Desarrollo Urbano, intenta por varias vías cambiar la mala percepción que tiene la comunidad frente a la construcción de troncal de Transmilenio por la carrera séptima.
Encuentros con la comunidad, volantes, puntos de información a lo largo de la vía, publicidad en paraderos y en diferentes medios de comunicación, son los variados métodos que ha desarrollado la «Bogotá Mejor Para Todos», para que la propuesta de Transmilenio se convierta en el imaginario de una mejor movilidad para la ciudad en este punto.
Hoy profesores, padres y alumnos del colegio Camilo Torres, se dieron cita con la directora del IDU, Yaneth Mantilla, quien explicó las «bondades» de Transmilenio, mientras a su vez el colectivo de personas narró cómo en su cotidianidad la llegada hasta calle 33 con carrera séptima se convirtió en una frecuente odisea.
Mantilla por su parte también trató de amainar los ánimos afirmando que la lección sobre urbanidad estaba aprendida para quienes temen aún que esta vía histórica en Bogotá se convirtiera en una segunda AV. Caracas, donde la inseguridad y el paso de Transmilenio acabó con la prosperidad para el comercio.
La directora del Idu puntualizó que pese a los dos meses de retraso en el conograma inicial del proyecto, se están tomando todas las medidas para que no se incurra en ningún riesgo, sobre todo con los diseños.
22 de los 253 predios requeridos para esta obra ya se compraron y se sigue conciliando con los propietarios de otros predios que también debe adquirir el Distrito para darle vía libre a la construcción de la troncal de TM por la séptima históricamente bautizada como la Avenida Eduardo Posada Flórez.