Con el objetivo de acabar los estereotipos y disminuir el machismo en la ciudad la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte (SDRD) lanzó el Sistema Distrital de Cuidado, primero de su tipo en Latinoamérica, que a través de la ‘Escuela Hombres al Cuidado’, empezará la ruta de la transformación cultural en Bogotá. Un programa que tiene como objetivo redistribuir los trabajos de cuidado de manera equitativa permitiendo relevar a las mujeres de dichas responsabilidades y liberarles tiempo para que puedan descansar, formarse y mejorar su bienestar con más y mejores oportunidades.
“Cuidar no es un don natural de las mujeres, nosotras no nacimos sabiendo cocinar, planchar o limpiar, a cuidar se aprende. Los estereotipos nos han hecho creer que el cuidado es un trabajo solo de las mujeres. Con la Escuela lograremos que más hombres asuman su responsabilidad en los trabajos del cuidado de sus hogares. Así tendremos una Bogotá cuidadora para las mujeres y para todas las personas¨ resaltó la Alcaldesa Mayor, Claudia López.
Las cifras no mienten y bajo el estereotipo de que los hombres son proveedores que pueden salir a trabajar, mientras que las mujeres se deben quedar en casa haciendo los trabajos de cuidado sin remuneración, solo seis de cada 10 hombres participan en el trabajo de cuidado, mientras que nueve de cada 10 mujeres lo hacen. Además, ellas dedican cinco horas y 30 minutos a estos trabajos, mientras que ellos solo dos horas y 19 minutos.
“La Escuela es un espacio que permite incidir en la transformación social para la redistribución de los trabajos de cuidado en el hogar, así como para acceder a áreas de formación del cuidado, incluyendo la emocional, de salud y de relaciones con otras personas en espacio privado y público. Un pequeño paso hacia el cambio sistémico. Los hombres podemos cambiar, y eso es revolucionario. El reto es hacernos cargo”, destacó Nicolás Montero, secretario de Cultura, Recreación y Deporte.
¡A cuidar se aprende!
Gracias a la articulación de las Secretarías de la Mujer, Cultura, Integración Social, IDARTES e IDPAC se llevará a diferentes localidades de Bogotá, servicios pedagógicos y divertidos a las Manzanas del Cuidado y a las Unidades Móviles, para que las personas cuidadoras, los hombres y sus familias aprendan cómo hacer trabajos de cuidado y a distribuirlos equitativamente.
“Al igual que aprendemos cosas, podemos desaprender otras, podemos desaprender el machismo y aprender a cuidar, por eso el Sistema tiene una estrategia pedagógica y de cambio cultural que fomenta la redistribución del trabajo de cuidado entre toda la sociedad”, destacó Diana Rodríguez Franco, Secretaria de la Mujer.
Panorama local
Según el Observatorio y Gestión del Conocimiento Cultural, los hombres en Bogotá no participan equitativamente de las responsabilidades del hogar y solamente reportan encargarse de la limpieza de sus vehículos o de hacer reparaciones en la vivienda y en los electrodomésticos. Sobre actividades de crianza en menores de siete años los resultados son poco alentadores:
- Tan solo un 3% se encargaron de cambiar pañales frente a un 30% de las mujeres que así lo hicieron.
- Un 10% de los hombres dijeron encargarse de la preparación de alimentos para sus hijos frente a un 50% de las mujeres.
- Un 11% de los padres dijo encargarse de llevarles a citas médicas, frente a un 50% de las mujeres que así lo hicieron.
- Solamente un 7% de los padres aseguró responsabilizarse de dialogar, aconsejar y escuchar, frente a un 40% de las mujeres.
Qué servicios ofrece la estrategia
La Escuela Móvil recorrerá las localidades de la ciudad llevando en su interior asesoría personalizada para hombres que quieran participar más de las labores del cuidado y ofrecerá herramientas artísticas y pedagógicas para que hagan acuerdos en sus casas sobre la distribución de las labores del hogar.
Los sábados y domingos de 8:00 a.m. a 6:00 p.m., la Escuela estará funcionando en las Manzanas del Cuidado de Usme y Kennedy, con una oferta mensual de formación gratuita sobre los trabajos de cuidado y su importancia en el sostenimiento de la vida.