La Sijin capturó a una mujer de 27 años, quien sería la principal sospechosa de la muerte de su hijo de dos meses de nacido, quien habría fallecido en situaciones relacionadas con maltrato extremo.
La orden de captura se hizo efectiva en la localidad de Puente Aranda, en donde residía la mujer conocida como ‘La Peliroja’, quien se ganaría la vida como vendedora de flores en los semáforos de la ciudad.
Según la investigación, las condiciones en las que se encontraba el bebé eran precarias, pues en la inspección técnica al cuerpo se habría evidenciado señales de descamación, heridas en su cuello, piernas y rostro.
Sin embargo, una de las heridas más complicadas se focalizó en sus partes íntimas, donde la víctima tendría graves indicios de una dermatitis de pañal (pañalitis).
Esto permitió la acción judicial por parte de la SIJIN-MEBOG, la cual presentó a la implicada ante un juez de control de garantías por el delito de homicidio agravado, situación por la que fue cobijada con medida de aseguramiento.
Desarticulan banda de explotación de menores
Las autoridades dieron captura a los miembros de la autodenominada estructura ‘Tango’ señalada de inducción a la prostitución a menores de 18 años y proxenetismo. Las capturas se registraron en el barrio Santa Fe, localidad de los Mártires.
Desde hace 13 meses se verificó una información por parte de los investigadores del Grupo de Delitos Sexuales de la SIJIN-Mebog, que llevó a la individualización, identificación, captura y judicialización de seis hombres y una mujer, quienes mediante redes sociales concertarían encuentros sexuales con menores de edad en una edificación en la que albergarían a las jovencitas.
Denuncias, entrevistas, reconocimientos y análisis de información fueron las actividades desplegadas por los uniformados de policía judicial, que establecerían que los líderes de la organización delictiva serían alias ‘La Gorda’ y ‘Caliche’, quienes con ayuda de ‘César’, ‘El Cucho’, ‘Luis’, ‘El Calvo’ y ‘El Negro’ coordinarían los servicios de tipo sexual, los cuales serían contratados por hombres mayores de edad, a los que además les suministrarían fotos intimas de las víctimas.
Con este material probatorio, se desarrolló una diligencia de registró y allanamiento, en la que fueron capturados los siete indiciados y se le restituyeron los derechos a siete menores de edad, quienes habrían sido víctimas del principal delito de trata de personas con la conducta conexa de estímulo a la prostitución. Los implicados fueron cobijados con medida de aseguramiento.